𝗠𝗲𝗿𝗶𝘁𝗼𝗰𝗿𝗮𝗰𝗶𝗮 𝗲𝗻 𝗲𝗹 𝗠𝗶𝗻𝗲𝗱𝘂: 𝗿𝗲𝗮𝗹𝗶𝗱𝗮𝗱 𝗼 𝗺𝗶𝘁𝗼, ¿𝗹𝗮 𝗺𝗲𝗿𝗶𝘁𝗼𝗰𝗿𝗮𝗰𝗶𝗮 𝗻𝗼 𝘁𝗶𝗲𝗻𝗲 𝗮𝗱𝗲𝗽𝘁𝗼𝘀?
𝙇𝙖 𝙝𝙚𝙧𝙧𝙖𝙢𝙞𝙚𝙣𝙩𝙖 𝙦𝙪𝙚 𝙘𝙤𝙢𝙗𝙖𝙩𝙚 𝙡𝙖 𝙢𝙞𝙨𝙚𝙧𝙞𝙖 𝙝𝙪𝙢𝙖𝙣𝙖 𝙚𝙣 𝙥𝙤𝙡í𝙩𝙞𝙘𝙖 𝙨𝙚 𝙙𝙚𝙣𝙤𝙢𝙞𝙣𝙖 𝙚𝙙𝙪𝙘𝙖𝙘𝙞ó𝙣 𝙮 𝙘𝙤𝙣𝙘𝙞𝙚𝙣𝙘𝙞𝙖 𝙨𝙤𝙘𝙞𝙖𝙡.
𝑷𝒐𝒓: Dr. 𝑬𝒅𝒘𝒊𝒏 𝑸𝒖𝒊𝒔𝒑𝒆 𝑨𝒍𝒄𝒂𝒓𝒓𝒂𝒛
𝙀𝙣 𝙚𝙡 𝙈𝙞𝙣𝙚𝙙𝙪, 𝙡𝙖𝙗𝙤𝙧𝙖𝙣 3.449 𝙛𝙪𝙣𝙘𝙞𝙤𝙣𝙖𝙧𝙞𝙤𝙨 𝙥ú𝙗𝙡𝙞𝙘𝙤𝙨: 𝙚𝙡 44,3% 𝙨ó𝙡𝙤 𝗵𝗮 𝗼𝗯𝘁𝗲𝗻𝗶𝗱𝗼 𝘂𝗻𝗮 𝙡𝙞𝙘𝙚𝙣𝙘𝙞𝙖𝙩𝙪𝙧𝙖 𝘂𝗻𝗶𝘃𝗲𝗿𝘀𝗶𝘁𝗮𝗿𝗶𝗮 𝙮/𝙤 𝙩í𝙩𝙪𝙡𝙤 𝙥𝙚𝙙𝙖𝙜ó𝙜𝙞𝙘𝙤 𝗰ó𝗺𝗼 𝗳𝗼𝗿𝗺𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗽𝗿𝗼𝗳𝗲𝘀𝗶𝗼𝗻𝗮𝗹, 𝙚𝙡 25,3% 𝙚𝙨𝙩𝙪𝙙𝙞𝙤𝙨 𝙘𝙤𝙣𝙘𝙡𝙪𝙞𝙙𝙤𝙨 𝙙𝙚 𝙢𝙖𝙚𝙨𝙩𝙧í𝙖; 20,3% 𝙜𝙧𝙖𝙙𝙤 𝙙𝙚 𝙢á𝙨𝙩𝙚𝙧; 𝙪𝙣 𝙧𝙚𝙙𝙪𝙘𝙞𝙙𝙤 1,83% 𝙜𝙧𝙖𝙙𝙤 𝙙𝙚 𝙙𝙤𝙘𝙩𝙤𝙧 𝙮/𝙤 𝙚𝙨𝙩𝙪𝙙𝙞𝙤𝙨 𝙘𝙤𝙣𝙘𝙡𝙪𝙞𝙙𝙤𝙨 𝙙𝙚 𝙙𝙤𝙘𝙩𝙤𝙧𝙖𝙙𝙤; 3,2% 𝙛𝙪𝙣𝙘𝙞𝙤𝙣𝙖𝙧𝙞𝙤𝙨 𝗽𝗿𝗲𝘀𝗲𝗻𝘁𝗮𝗻 𝙜𝙧𝙖𝙙𝙤 𝙙𝙚 𝙗𝙖𝙘𝙝𝙞𝙡𝙡𝙚𝙧; 3,6% 𝙩í𝙩𝙪𝙡𝙤 𝙥𝙧𝙤𝙛𝙚𝙨𝙞𝙤𝙣𝙖𝙡 𝙩é𝙘𝙣𝙞𝙘𝙤; 0,49% 𝙨𝙚𝙘𝙪𝙣𝙙𝙖𝙧𝙞𝙖 𝙘𝙤𝙢𝙥𝙡𝙚𝙩𝙖; 0,41% 𝙚𝙜𝙧𝙚𝙨𝙖𝙙𝙤𝙨 𝙙𝙚 𝙘𝙖𝙧𝙧𝙚𝙧𝙖𝙨 𝙩é𝙘𝙣𝙞𝙘𝙖𝙨 𝙮/𝙤 𝙘𝙤𝙣 𝙚𝙨𝙩𝙪𝙙𝙞𝙤𝙨 𝙪𝙣𝙞𝙫𝙚𝙧𝙨𝙞𝙩𝙖𝙧𝙞𝙤𝙨 𝙞𝙣𝙘𝙤𝙢𝙥𝙡𝙚𝙩𝙤𝙨; 0,38% 𝙚𝙜𝙧𝙚𝙨𝙖𝙙𝙤𝙨 𝙙𝙚 𝙪𝙣𝙞𝙫𝙚𝙧𝙨𝙞𝙙𝙖𝙙𝙚𝙨 𝙮 0,2% 𝙙𝙚 𝙡𝙤𝙨 𝙥𝙧𝙤𝙛𝙚𝙨𝙞𝙤𝙣𝙖𝙡𝙚𝙨 𝙙𝙚 𝙘𝙤𝙣𝙛𝙞𝙖𝙣𝙯𝙖 𝙣𝙤 𝙧𝙚𝙜𝙞𝙨𝙩𝙧𝙖𝙣 𝙛𝙤𝙧𝙢𝙖𝙘𝙞ó𝙣 𝙥𝙧𝙤𝙛𝙚𝙨𝙞𝙤𝙣𝙖𝙡 (data obtenida del Minedu, a través de Ley N° 27806, Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública).
Ante esta realidad concreta, nos planteamos las siguientes interrogantes: ¿𝐂ó𝐦𝐨 𝐟𝐮𝐞𝐫𝐨𝐧 𝐜𝐨𝐧𝐭𝐫𝐚𝐭𝐚𝐝𝐨𝐬 𝐲/𝐨 𝐧𝐨𝐦𝐛𝐫𝐚𝐝𝐨𝐬 𝐞𝐬𝐭𝐨𝐬 𝐩𝐫𝐨𝐟𝐞𝐬𝐢𝐨𝐧𝐚𝐥𝐞𝐬 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐌𝐢𝐧𝐞𝐝𝐮 𝐜𝐨𝐧 𝐬𝐮𝐞𝐥𝐝𝐨𝐬 𝐞𝐱𝐡𝐨𝐛𝐢𝐭𝐚𝐧𝐭𝐞𝐬?, ¿𝐂ó𝐦𝐨 𝐩𝐫𝐞𝐭𝐞𝐧𝐝𝐞𝐫 𝐞𝐥 𝐝𝐞𝐬𝐚𝐫𝐫𝐨𝐥𝐥𝐨 𝐲 𝐛𝐢𝐞𝐧𝐞𝐬𝐭𝐚𝐫 𝐝𝐞 𝐧𝐮𝐞𝐬𝐭𝐫𝐚 𝐬𝐨𝐜𝐢𝐞𝐝𝐚𝐝, 𝐬𝐢𝐧𝐨 𝐞𝐦𝐩𝐨𝐝𝐞𝐫𝐚𝐦𝐨𝐬 𝐚 𝐥𝐨𝐬 𝐦á𝐬 𝐜𝐚𝐩𝐚𝐜𝐞𝐬 𝐞 í𝐧𝐭𝐞𝐠𝐫𝐨𝐬?, ,¿𝐏𝐨𝐫 𝐪𝐮é 𝐧𝐨 𝐬𝐞 𝐫𝐞𝐬𝐩𝐞𝐭𝐚 𝐥𝐚 𝐦𝐞𝐫𝐢𝐭𝐨𝐜𝐫𝐚𝐜𝐢𝐚?, ¿𝐏𝐨𝐫 𝐪𝐮é 𝐡𝐢𝐩𝐨𝐭𝐞𝐜𝐚𝐧 𝐬𝐮 𝐜𝐮𝐞𝐫𝐩𝐨, 𝐚𝐥𝐦𝐚 𝐲 𝐞𝐬𝐩í𝐫𝐢𝐭𝐮 𝐩𝐨𝐫 𝐮𝐧 𝐩𝐮𝐞𝐬𝐭𝐨 𝐝𝐞 𝐭𝐫𝐚𝐛𝐚𝐣𝐨? Pareciera que la idea de que vivimos en una sociedad meritocrática es una simple ilusión, ya que por meritocracia entendemos una sociedad en la que los ingresos y el trabajo se otorgan únicamente sobre la base de los méritos de la persona, la nuestra es una sociedad muy alejada de ese ideal, es decir, estamos a años luz de contratar profesionales basados en principios éticos de igualdad de oportunidades y transparencia.
𝐄𝐧 𝐭é𝐫𝐦𝐢𝐧𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐑𝐀𝐄, 𝐦𝐞𝐫𝐢𝐭𝐨𝐜𝐫𝐚𝐜𝐢𝐚 𝐞𝐬 𝐮𝐧 𝐬𝐢𝐬𝐭𝐞𝐦𝐚 […] 𝐞𝐧 𝐪𝐮𝐞 𝐥𝐨𝐬 𝐩𝐮𝐞𝐬𝐭𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐫𝐞𝐬𝐩𝐨𝐧𝐬𝐚𝐛𝐢𝐥𝐢𝐝𝐚𝐝 𝐬𝐞 𝐚𝐝𝐣𝐮𝐝𝐢𝐜𝐚𝐧 𝐞𝐧 𝐟𝐮𝐧𝐜𝐢ó𝐧 𝐝𝐞 𝐥𝐨𝐬 𝐦é𝐫𝐢𝐭𝐨𝐬 𝐩𝐞𝐫𝐬𝐨𝐧𝐚𝐥𝐞𝐬; es decir, la meritocracia es una norma basada en el mérito, en la cual, los distintos puestos de trabajo son conquistados con fundamento en la integridad, capital intelectual, talento, nivel de educación, competencia y/o aptitud específica para un puesto de trabajo. Integra la capacidad de generar valor público, desempeño eficiente y esfuerzo.
Los 𝐩𝐫𝐢𝐧𝐜𝐢𝐩𝐚𝐥𝐞𝐬 𝐛𝐞𝐧𝐞𝐟𝐢𝐜𝐢𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐦𝐞𝐫𝐢𝐭𝐨𝐜𝐫𝐚𝐜𝐢𝐚 se pueden resumir en lo siguiente: 𝗶) 𝗴𝗮𝗿𝗮𝗻𝘁𝗶𝘇𝗮 𝗹𝗮 𝗶𝗴𝘂𝗮𝗹𝗱𝗮𝗱 𝗱𝗲 𝗼𝗽𝗼𝗿𝘁𝘂𝗻𝗶𝗱𝗮𝗱𝗲𝘀 𝗲𝗻 𝗲𝗹 𝗮𝗰𝗰𝗲𝘀𝗼 𝗮 𝗹𝗮 𝗳𝘂𝗻𝗰𝗶ó𝗻 𝗽ú𝗯𝗹𝗶𝗰𝗮 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗺𝗲𝗷𝗼𝗿𝗮𝗿 𝗹𝗮 𝗰𝗮𝗹𝗶𝗱𝗮𝗱 𝗱𝗲 𝗹𝗼𝘀 𝘀𝗲𝗿𝘃𝗶𝗰𝗶𝗼𝘀 𝗾𝘂𝗲 𝗲𝗹 𝗘𝘀𝘁𝗮𝗱𝗼 𝗽𝗿𝗼𝘃𝗲𝗲 𝗮 𝗹𝗼𝘀 𝗰𝗶𝘂𝗱𝗮𝗱𝗮𝗻𝗼𝘀, 𝗲 𝗶𝗻𝗰𝗲𝗻𝘁𝗶𝘃𝗮𝗿 𝗲𝗹 𝗱𝗲𝘀𝗮𝗿𝗿𝗼𝗹𝗹𝗼 𝗽𝗲𝗿𝘀𝗼𝗻𝗮𝗹 𝘆 𝗽𝗿𝗼𝗳𝗲𝘀𝗶𝗼𝗻𝗮𝗹 𝗱𝗲 𝗹𝗼𝘀 𝘁𝗿𝗮𝗯𝗮𝗷𝗮𝗱𝗼𝗿𝗲𝘀 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗮𝗱𝗺𝗶𝗻𝗶𝘀𝘁𝗿𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗽ú𝗯𝗹𝗶𝗰𝗮; ii) 𝒎𝒆𝒋𝒐𝒓𝒂 𝒆𝒍 𝒓𝒆𝒏𝒅𝒊𝒎𝒊𝒆𝒏𝒕𝒐 𝒚 𝒍𝒂 𝒑𝒓𝒐𝒅𝒖𝒄𝒕𝒊𝒗𝒊𝒅𝒂𝒅, 𝒍𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒔𝒆 𝒕𝒓𝒂𝒅𝒖𝒄𝒆 𝒆𝒏 𝒎𝒆𝒋𝒐𝒓𝒆𝒔 𝒑𝒐𝒍í𝒕𝒊𝒄𝒂𝒔 𝒚 𝒔𝒆𝒓𝒗𝒊𝒄𝒊𝒐𝒔 𝒒𝒖𝒆, 𝒂 𝒔𝒖 𝒗𝒆𝒛, 𝒄𝒐𝒏𝒕𝒓𝒊𝒃𝒖𝒚𝒆𝒏 𝒂 𝒒𝒖𝒆 𝒍𝒂𝒔 𝒔𝒐𝒄𝒊𝒆𝒅𝒂𝒅𝒆𝒔 𝒔𝒆𝒂𝒏 𝒎á𝒔 𝒇𝒆𝒍𝒊𝒄𝒆𝒔, 𝒎á𝒔 𝒔𝒂𝒏𝒂𝒔 𝒚 𝒎á𝒔 𝒑𝒓ó𝒔𝒑𝒆𝒓𝒂𝒔 (𝑶𝑪𝑫𝑬, 2020); iii) reduce de manera significativa la corrupción; iv) 𝗽𝗿𝗼𝗺𝘂𝗲𝘃𝗲 𝗽𝗿𝗼𝗰𝗲𝘀𝗼𝘀 𝗱𝗲 𝘁𝗼𝗺𝗮 𝗱𝗲 𝗱𝗲𝗰𝗶𝘀𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝗼𝗯𝗷𝗲𝘁𝗶𝘃𝗼𝘀 𝘆 𝘁𝗿𝗮𝗻𝘀𝗽𝗮𝗿𝗲𝗻𝘁𝗲𝘀 𝗾𝘂𝗲 𝗵𝗮𝗰𝗲𝗻 𝗾𝘂𝗲 𝘀𝗲𝗮 𝗺á𝘀 𝗱𝗶𝗳í𝗰𝗶𝗹 𝗻𝗼𝗺𝗯𝗿𝗮𝗿 𝗮 𝗽𝗲𝗿𝘀𝗼𝗻𝗮𝘀 𝗾𝘂𝗲 𝗻𝗼 𝗿𝗲ú𝗻𝗲𝗻 𝗹𝗼𝘀 𝗿𝗲𝗾𝘂𝗶𝘀𝗶𝘁𝗼𝘀 𝗻𝗲𝗰𝗲𝘀𝗮𝗿𝗶𝗼𝘀 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗱𝗲𝘀𝗲𝗺𝗽𝗲ñ𝗮𝗿𝘀𝗲 𝗲𝗻 𝗹𝗼𝘀 𝗰𝗮𝗿𝗴𝗼𝘀; v) garantiza la eficacia, eficiencia y efectividad de la gestión pública; vi) 𝗮𝘆𝘂𝗱𝗮 𝗮 𝗰𝗿𝗲𝗮𝗿 𝘂𝗻 𝗲𝗻𝘁𝗼𝗿𝗻𝗼 𝗺á𝘀 𝗷𝘂𝘀𝘁𝗼, 𝗽𝘂𝗲𝘀𝘁𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝗹𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝗹𝗼𝗴𝗿𝗮 𝗰𝗮𝗱𝗮 𝗽𝗲𝗿𝘀𝗼𝗻𝗮 𝗲𝘀 𝗴𝗿𝗮𝗰𝗶𝗮𝘀 𝗮 𝘀𝘂𝘀 𝗲𝘀𝗳𝘂𝗲𝗿𝘇𝗼𝘀 𝘆 𝗺é𝗿𝗶𝘁𝗼𝘀 𝗮 𝗹𝗼 𝗹𝗮𝗿𝗴𝗼 𝗱𝗲 𝘀𝘂 𝘃𝗶𝗱𝗮, 𝘆 𝗻𝗼 𝗽𝗼𝗿 𝗼𝘁𝗿𝗮𝘀 𝗿𝗮𝘇𝗼𝗻𝗲𝘀 𝗰𝗼𝗺𝗼 𝗽𝘂𝗲𝗱𝗲𝗻 𝘀𝗲𝗿 𝗮𝗽𝗲𝗹𝗹𝗶𝗱𝗼, 𝗿𝗶𝗾𝘂𝗲𝘇𝗮, 𝘀𝗲𝘅𝗼, 𝗿𝗲𝗹𝗶𝗴𝗶ó𝗻, 𝗽𝗼𝗹í𝘁𝗶𝗰𝗮…(𝗠𝗲𝗿𝗼𝗱𝗶𝗼, 𝗝., 2021); vii) los sistemas meritocráticos convocan a profesionales más cualificados a quienes la corrupción quizás tiente menos; y, viii) 𝗰𝗿𝗲𝗮 𝘂𝗻 𝗲𝘀𝗽í𝗿𝗶𝘁𝘂 𝗱𝗲 𝗰𝘂𝗲𝗿𝗽𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝗿𝗲𝗰𝗼𝗺𝗽𝗲𝗻𝘀𝗮 𝗲𝗹 𝘁𝗿𝗮𝗯𝗮𝗷𝗼 𝘁𝗲𝗻𝗮𝘇 𝘆 𝗹𝗮𝘀 𝗵𝗮𝗯𝗶𝗹𝗶𝗱𝗮𝗱𝗲𝘀.
𝗘𝗻 𝗲𝗹 𝗺𝗮𝗻𝘂𝗮𝗹 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗢𝗖𝗗𝗘 𝘀𝗼𝗯𝗿𝗲 𝗶𝗻𝘁𝗲𝗴𝗿𝗶𝗱𝗮𝗱 𝗽ú𝗯𝗹𝗶𝗰𝗮 𝘀𝗲 𝗮𝗳𝗶𝗿𝗺𝗮 𝗾𝘂𝗲: […] 𝗲𝗹 𝗰𝗹𝗶𝗲𝗻𝘁𝗲𝗹𝗶𝘀𝗺𝗼, 𝗲𝗹 𝗻𝗲𝗽𝗼𝘁𝗶𝘀𝗺𝗼 𝘆 𝗲𝗹 𝗽𝗮𝘁𝗿𝗼𝗻𝗮𝘇𝗴𝗼 𝗽𝘂𝗲𝗱𝗲𝗻 𝘀𝗲𝗿 𝗳𝗼𝗿𝗺𝗮𝘀 𝗱𝗲 𝗰𝗼𝗿𝗿𝘂𝗽𝗰𝗶ó𝗻 𝗰𝘂𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗰𝗼𝗻𝗹𝗹𝗲𝘃𝗮𝗻 𝗹𝗮 𝘂𝘁𝗶𝗹𝗶𝘇𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗱𝗲 𝗳𝗼𝗻𝗱𝗼𝘀 𝗽ú𝗯𝗹𝗶𝗰𝗼𝘀 𝗽𝗮𝗿𝗮 𝗲𝗻𝗿𝗶𝗾𝘂𝗲𝗰𝗲𝗿 𝗮 𝗹𝗮𝘀 𝗽𝗲𝗿𝘀𝗼𝗻𝗮𝘀 𝗲𝗻 𝗳𝘂𝗻𝗰𝗶ó𝗻 𝗱𝗲 𝘀𝘂𝘀 𝗹𝗮𝘇𝗼𝘀 𝗳𝗮𝗺𝗶𝗹𝗶𝗮𝗿𝗲𝘀, 𝘀𝘂𝘀 𝗮𝗳𝗶𝗹𝗶𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝗽𝗼𝗹í𝘁𝗶𝗰𝗮𝘀 𝗼 𝘀𝘂 𝗰𝗼𝗻𝗱𝗶𝗰𝗶ó𝗻 𝘀𝗼𝗰𝗶𝗮𝗹. En casos extremos, se pueden crear puestos públicos sin ninguna necesidad real de trabajo, con la mera intención de proporcionar una fuente de ingresos para recompensar a los aliados políticos. En otros casos, cargos del sector público pueden ser comprados y vendidos «bajo la mesa» e inclusive hipotecar su cuerpo, mente y espíritu para acceder a un puesto que no le corresponde.
Veamos, ¿𝗰𝗿𝗲𝗲 𝘂𝘀𝘁𝗲𝗱 𝘀𝗲ñ𝗼𝗿 𝗹𝗲𝗰𝘁𝗼𝗿 𝗾𝘂𝗲 𝗻𝘂𝗲𝘀𝘁𝗿𝗮 𝘀𝗼𝗰𝗶𝗲𝗱𝗮𝗱 𝘀𝗲 𝗿𝗶𝗴𝗲 𝗲𝗻 𝗳𝘂𝗻𝗰𝗶ó𝗻 𝗮 𝗹𝗮 𝗺𝗲𝗿𝗶𝘁𝗼𝗰𝗿𝗮𝗰𝗶𝗮? o mejor aún, analicemos a nivel micro la realidad del Minedu, ¿𝗰𝗿𝗲𝗲𝘀 𝗾𝘂𝗲 𝗹𝗼𝘀 𝗳𝘂𝗻𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗿𝗶𝗼𝘀 𝗱𝗲 𝗲𝘀𝘁𝗲 𝗶𝗺𝗽𝗼𝗿𝘁𝗮𝗻𝘁𝗲 𝘀𝗲𝗰𝘁𝗼𝗿 𝗵𝗮𝗻 𝘀𝗶𝗱𝗼 𝗲𝗺𝗽𝗼𝗱𝗲𝗿𝗮𝗱𝗼𝘀 𝗲𝗻 𝗳𝘂𝗻𝗰𝗶ó𝗻 𝗮 𝘀𝘂𝘀 𝗰𝗮𝗽𝗮𝗰𝗶𝗱𝗮𝗱𝗲𝘀 𝘆 𝗺é𝗿𝗶𝘁𝗼𝘀? Para responder a la interrogante, presento una data obtenida a través de Ley N° 27806, Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública: En el Ministerio de Educación (Minedu), hasta el 17 de mayo de 2023 laboraban 3.449 funcionarios públicos. De ese total el 44,3% sólo presenta licenciatura en las diversas áreas del saber y/o título pedagógico, el 25,3% estudios concluidos de maestría; 20,3% grado de máster; 𝘂𝗻 𝗿𝗲𝗱𝘂𝗰𝗶𝗱𝗼 1,83% 𝗴𝗿𝗮𝗱𝗼 𝗱𝗲 𝗱𝗼𝗰𝘁𝗼𝗿 𝘆/𝗼 𝗲𝘀𝘁𝘂𝗱𝗶𝗼𝘀 𝗰𝗼𝗻𝗰𝗹𝘂𝗶𝗱𝗼𝘀 𝗱𝗲 𝗱𝗼𝗰𝘁𝗼𝗿𝗮𝗱𝗼; 3,2% funcionarios con grado de bachiller; 3,6% título profesional técnico; 0,49% secundaria completa; 0,41% egresados de carreras técnicas y/o con estudios universitarios incompletos; 0,38% egresados de universidades y, finalmente, 0,2% de los profesionales de confianza no registran formación profesional alguna.
En función de los hallazgos, estamos en capacidad de afirmar que en el Minedu: i) no se aplican principios básicos de mérito y transparencia para gestionar, contratar y/o promover los recursos humanos; ii) no se promueve la meritocracia que garantice una generación eficiente de valor público; iii) altos niveles de subjetividad en la contratación del personal; iv) injerencias políticas improcedentes que se traducen en abuso de poder y conductas indebidas; y, v) ausencia de un sistema de evaluación objetiva que fomente la responsabilidad y la ética del servicio público.
Si queremos promover bienestar y desarrollo , es una necesidad de primer orden, cambiar radicalmente el nepotismo, padrinazgo y clientelaje que se practican en los tres niveles de gobierno desde los inicios de nuestra República. Asimismo, empoderar a las personas más integras y capaces es de urgente necesidad si queremos salir del subdesarrollo y generar valor público con eficacia, eficiencia y efectividad. No podemos darnos el lujo de gestionar la educación con personas no aptas. 𝙇𝙖 𝙝𝙚𝙧𝙧𝙖𝙢𝙞𝙚𝙣𝙩𝙖 𝙦𝙪𝙚 𝙘𝙤𝙢𝙗𝙖𝙩𝙚 𝙡𝙖 𝙢𝙞𝙨𝙚𝙧𝙞𝙖 𝙝𝙪𝙢𝙖𝙣𝙖 𝙚𝙣 𝙥𝙤𝙡í𝙩𝙞𝙘𝙖 𝙨𝙚 𝙙𝙚𝙣𝙤𝙢𝙞𝙣𝙖 𝙚𝙙𝙪𝙘𝙖𝙘𝙞ó𝙣 𝙮 𝙘𝙤𝙣𝙘𝙞𝙚𝙣𝙘𝙞𝙖 𝙨𝙤𝙘𝙞𝙖𝙡.
PD:
- La información registrada se puede verificar en el siguiente link:
https://drive.google.com/file/d/1CO3CzAiOOlTrb7oyUxwly1NyOJv0Q5Z2/view?usp=drive_link
- Doctor Edwin Quispe Alcarraz: Director ejecutivo y fundador de la ONGD Sabiduría para Obrar| Gestor Público por la Universidad del Pacífico (UP) | Docente Universitario en pre y posgrado | Investigador|
- Al autor se puede seguir a través de LinkedIn y Facebook:
https://www.facebook.com/edwin.quispealcarraz
- La ONGD Sabiduría Para Obrar es una organización inscrita en la Agencia Peruana de Cooperación Internacional (APCI), organismo adscrito al Ministerio de Relaciones Exteriores (RREE). Intervenimos proyectos de responsabilidad social en educación, medio ambiente y asistencia social. Certificamos todos nuestros voluntariados, válidos como experiencia laboral y prácticas preprofesionales.
Muy interesante este artículo dado que plantea interrogantes sobre los conceptos de mérito y transparencia en el Ministerio de Educación. Se cuestiona si los concursos y nombramientos se basan en principios éticos de igualdad de oportunidades y transparencia. También se menciona la importancia de reducir la corrupción y promover procesos de selección objetivos y transparentes. En resumen, el artículo analiza la implementación de la meritocracia en el ámbito educativo y plantea la necesidad de mejorar los procesos de selección y promoción para garantizar la igualdad de oportunidades y la eficiencia en el Ministerio de Educación.
Gracias por el comentario, éxitos profesionales
Los gobiernos populistas como el de Castillo juegan con el megisterio sin importales nada los niños, al nombrar indiscriminadamente a los profesores contratados, al margen de los derechos de los niños –sobre todo los más pobres– a tener maestros capacitados y calificados. Los sindicato del SUTEP y el MOVADEF sólo trafican con los niños inyectandoles odio y lucha de clases para preparara a la lucha armada no le importa para nada la meritocracia.
Gracias por tu comentario, éxitos profesionales.
Comparto algo para reflexionar: la cercanía al poder de estas corrientes ortodoxas también resucita, de una manera no imaginada, la llamada “acción directa de las masas”, una consecuencia directa de la permanente invocación al pueblo. De allí que, en las últimas semanas, todas las estrategias de las minorías radicalizadas en contra de la minería, de la agroexportación y otros sectores, se hayan reactivado y alcanzado niveles superlativos. Durante el gobierno corrupto de Castillo, se
Sin embargo, la estrategia de promover a las minorías radicalizadas no solo se produce en la acción directa sino también en las políticas públicas. En el Ministerio de Educación (Minedu), ha decidido detener la carrera pública magisterial en base a la meritocracia. ¿Con qué objeto? Con el plan evidente de convertir al magisterio en una herramienta política de la estrategia hacia la asamblea constituyente y, sobre todo, para adoctrinar a las nuevas generaciones que asisten a la escuela pública. Todo esta de cabeza en el MINEDU por los caviares y rojos.
Gracias por tu comentario, éxitos profesionales.
Interesante articulo que muestra que hasta el dia de hoy las formas de corrupcion a través el nepotismo y el 𝘆 𝗲𝗹 𝗽𝗮𝘁𝗿𝗼𝗻𝗮𝘇𝗴𝗼 y como ello esta enlazado con el por que hoy en dia 𝙡𝙖𝙗𝙤𝙧𝙖𝙣 3.449 𝙛𝙪𝙣𝙘𝙞𝙤𝙣𝙖𝙧𝙞𝙤𝙨 𝙥ú𝙗𝙡𝙞𝙘𝙤𝙨: 𝙚𝙡 44,3% 𝙨ó𝙡𝙤 𝗵𝗮 𝗼𝗯𝘁𝗲𝗻𝗶𝗱𝗼 𝘂𝗻𝗮 𝙡𝙞𝙘𝙚𝙣𝙘𝙞𝙖𝙩𝙪𝙧𝙖 𝘂𝗻𝗶𝘃𝗲𝗿𝘀𝗶𝘁𝗮𝗿𝗶𝗮 𝙮/𝙤 𝙩í𝙩𝙪𝙡𝙤 𝙥𝙚𝙙𝙖𝙜ó𝙜𝙞𝙘𝙤 𝗰ó𝗺𝗼 𝗳𝗼𝗿𝗺𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗽𝗿𝗼𝗳𝗲𝘀𝗶𝗼𝗻𝗮𝗹, y como estos funcionarios sin haber cumplido los requisitos del perfil requerido en los puesto tiene sueldos exorbitantes y ante ello la falta de fiscalizacion es algo que se ve deficiente .
Por ello la meritocracia cobra un papel importante hoy en dia para el funcionamiento eficaz de las instituciones .
Puestos de trabajo son conquistados con fundamento en la integridad, capital intelectual, talento, nivel de educación, competencia y/o aptitud específica para un puesto de trabajo. Integra la capacidad de generar valor público, desempeño eficiente y esfuerzo.
Gracias por tu comentario, éxitos profesionales.
En casos extremos, se pueden crear puestos públicos sin ninguna necesidad real de trabajo, con la mera intención de proporcionar una fuente de ingresos para recompensar a los aliados políticos. En otros casos, cargos del sector público pueden ser comprados y vendidos «bajo la mesa» e inclusive hipotecar su cuerpo, mente y espíritu para acceder a un puesto que no le corresponde. Los gobierno han estado mal acostumbrados y cuentan con maquinarias que se quieren enquistar en el poder cin capacidad alguna.
Gracias por tu comentario, éxitos profesionales.
Ciertamente, pareciera que la idea de que vivimos en una sociedad meritocrática es una simple ilusión, ya que por meritocracia entendemos una sociedad en la que los ingresos y el trabajo se otorgan únicamente sobre la base de los méritos de la persona, la nuestra es una sociedad muy alejada de ese ideal, es decir, estamos a años luz de contratar profesionales basados en principios éticos de igualdad de oportunidades y transparencia.
Esto tiene que cambiar.
Gracias por tu comentario, éxitos profesionales.
Si queremos promover bienestar y desarrollo , es una necesidad de primer orden, cambiar radicalmente el nepotismo, padrinazgo y clientelaje que se practican en los tres niveles de gobierno desde los inicios de nuestra República. Un artículo de opinión, respetuoso y real.
Gracias por tu comentario, éxitos profesionales.
La ofensiva contra la meritocracia solo es una estrategia de minorías que puede terminar estrellándose contra una reacción mayoritaria de la sociedad. Ni siquiera a nivel del magisterio la propuesta de terminar con la meritocracia responde a las mayorías. Un artículo muy interesante.
Gracias por tu comentario, éxitos profesionales.
Excelente artículo. Totalmenye de acuerdo. 𝙇𝙖 𝙝𝙚𝙧𝙧𝙖𝙢𝙞𝙚𝙣𝙩𝙖 𝙦𝙪𝙚 𝙘𝙤𝙢𝙗𝙖𝙩𝙚 𝙡𝙖 𝙢𝙞𝙨𝙚𝙧𝙞𝙖 𝙝𝙪𝙢𝙖𝙣𝙖 𝙚𝙣 𝙥𝙤𝙡í𝙩𝙞𝙘𝙖 𝙨𝙚 𝙙𝙚𝙣𝙤𝙢𝙞𝙣𝙖 𝙚𝙙𝙪𝙘𝙖𝙘𝙞ó𝙣 𝙮 𝙘𝙤𝙣𝙘𝙞𝙚𝙣𝙘𝙞𝙖 𝙨𝙤𝙘𝙞𝙖𝙡.
Gracias por tu comentario, éxitos profesionales.